Extraído del diario El Observador.
Hallaron en Uruguay restos fósiles 130 millones de años más antiguos que los dinosaurios
El país posee el yacimiento de conservación más antiguo de América del Sur
Dos ramas mandibulares articuladas encontradas en Uruguay
Investigaciones realizadas en Uruguay permitieron conocer que nuestro país posee el Konservat Lagerstätte más antiguo de América del Sur y el segundo para lo que se conoce como Gondwana: el supercontinente formado hace más de 300 millones de años, en el territorio integrado por lo que hoy es América del Sur, África, India, Australia y Antártida.
Los Konservat Lagerstätten son yacimientos fosilíferos donde determinadas condiciones favorecen la preservación de estructuras que no son frecuentemente conocidas en el registro fósil. En estos espacios fueron hallados restos fósiles casi 130 millones de años más viejos que los dinosaurios, con lo que se pudo determinar que Uruguay posee el yacimiento de conservación más antiguo de América del Sur.
Las investigaciones son lideradas por la paleontóloga uruguaya Graciela Piñeiro, quien semanas atrás presentó los hallazgos de los fósiles de embriones de reptiles más antiguos del planeta. El nuevo hallazgo es un espécimen consistente en dos ramas mandibulares articuladas (la izquierda y derecha) y en cada una se encuentra completo el nervio trigémino y los vasos capilares. También hallaron cangrejos fósiles extinguidos.
La científica explicó que actualmente lo más significativo del trabajo es que los nuevos fósiles hallados son muy raros de encontrar en el registro fósil de paleontología. Indicó que lo usual es hallar huesos, es decir las partes más duras de cada animal o caparazones de invertebrados como caracoles o almejas. “Esas son las partes con las que trabajamos y decimos cómo es la anatomía ósea del animal”, explicó a modo de ejemplo la paleontóloga.
Sin embargo, los fósiles encontrados ahora, permiten a los científicos “ir un paso más allá” y conocer animales que vivieron hace casi 300 millones de años en un ambiente hostil.
“Lo que nosotros descubrimos nos permite saber aspectos del comportamiento que son poco fosilizables. Es decir cómo comían, cómo se reproducían, cómo se adaptaban tan bien a un ambiente que no es muy favorable a la vida, como lo es un lago muy salado y con poco oxigeno”, explicó Piñeiro.
Hola Lucía
ResponderEliminarMuy buena información. Estuvo bien citar la fuente, aunque faltó la fecha del artículo original del diario.
Salduos